En el marco de la inauguración de la Feria Internacional de Viajes y Vacaciones (VyVA 2025), se realizó la ceremonia de premiación del concurso Mujer Empresaria Turística 2025, iniciativa impulsada por Sernatur, el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género y BancoEstado, que desde hace dieciséis años visibiliza los emprendimientos liderados por mujeres en el sector.
Mujer Empresaria Turística 2025: Lorena Mardones y Gladys Ponce, ejemplos de liderazgo y territorio
Las emprendedoras detrás de Cabritalegre (O’Higgins) y Viña El Quillay (Ñuble) fueron reconocidas en la Feria VyVA 2025 por su aporte a la identidad local.
Lorena Mardones, Cabritalegre.
En esta edición, el reconocimiento recayó en Lorena Mardones Ramírez, fundadora de Cabritalegre en Placilla (Región de O’Higgins), y en Gladys Ponce Rosales, creadora de Viña El Quillay en Portezuelo (Región de Ñuble). Ambas empresarias fueron distinguidas por su compromiso con la identidad local, la sostenibilidad y la innovación turística desde sus territorios.
El director nacional de Sernatur, Cristóbal Benítez Villafranca, destacó que el certamen “es una plataforma para fortalecer una oferta turística diferenciada, que ponga en valor la identidad local, promueva la colaboración comunitaria y asegure la sostenibilidad económica, social y medioambiental”.
Cabritalegre: innovación con sabor local
Para Lorena Mardones, el camino del emprendimiento comenzó con su tesis universitaria sobre la leche de cabra, insumo que transformó en el corazón de su negocio.
“Hoy tenemos tres tiendas —en Placilla, Santiago y Pichilemu—, un e-commerce que factura más de $40 millones mensuales y un proyecto de fábrica para seguir creciendo. Más que números, somos identidad”, afirmó.
Su marca Cabritalegre ofrece una línea de productos libres de leche de vaca, gluten, soya y refinados, y ha sido reconocida por la calidad de sus quesos cremosos y dulces innovadores, todos elaborados con materias primas locales.
Viña El Quillay: rescate patrimonial y enoturismo
Desde la Región de Ñuble, Gladys Ponce Rosales fundó Viña El Quillay en el valle del Itata, una iniciativa que combina producción vitivinícola y experiencias de enoturismo sustentable.
“Nuestro propósito va más allá del vino. Rescatamos prácticas tradicionales, ofrecemos experiencias con identidad y generamos espacios de encuentro para la comunidad. Emprender no es fácil, pero vale la pena cuando lo haces con convicción y propósito”, señaló.
Hoy, Viña El Quillay se ha consolidado como un referente regional en la producción de vinos patrimoniales, integrando turismo rural, sostenibilidad y cultura en un solo proyecto.
Más que un premio: una red de inspiración
Las ganadoras recibieron $2.500.000 en efectivo, además de un kit audiovisual promocional para fortalecer su posicionamiento. Con ello, se suman a una comunidad de más de 30 mujeres que han sido distinguidas por este concurso desde su creación.
Con cada versión, Mujer Empresaria Turística reafirma el rol transformador de las mujeres en el turismo chileno, un sector donde la gestión con propósito y la conexión con el territorio se consolidan como claves para el desarrollo local.
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