Conectividad aérea: el lento camino a la recuperación

Por Guillermo Adrianzen

La recuperación de la industria aeronáutica tras años complejos marcados una paralización casi total en 2020 por el Covid-19, se mantiene como una preocupación que cruza por compañías aéreas, autoridades de gobierno y gremios de turismo.

Una demanda alta de vuelos es señal de buena salud para el sector turístico, que en Chile concentra esfuerzos en manejar números similares al año 2019, cuando el aeropuerto de Santiago reportó un tráfico de 24 millones de pasajeros.

En la otra vereda, el turismo emisivo refleja comportamientos relevantes para las turoperadores y agencias de turismo dedicadas a satisfacer las necesidades de un público que, para bien y mal, no esconde cicatrices y aprendizajes tras dos años sin viajes.

Como una clave para seguir reactivando el turismo internacional, la Asociación Chilena de Empresas de Turismo —Achet— sostiene que el principal esfuerzo debe ser la recuperación de la conectividad aérea.

“Hoy estamos llegando a 19 destinos internacionales y en el año 2019 eran 26, es decir estamos 27 % abajo en lo que es conectividad internacional punto a punto, que no nos permite traer a esos turistas e ir a los mercados”, explicó Lorena Arriagada, secretaria general de Achet.

De las 50 ciudades que recibieron vuelos internacionales desde Chile, en abril y mayo del presente año se registraron 38 y 37 respectivamente. Traducido en un porcentaje global, se marca un 24,7% en promedio respecto a frecuencias semanales de vuelos internacionales que despegaron desde Chile.

Por ejemplo, al comparar los dos escenarios se establece que hoy existen 56 vuelos semanales entre Santiago y el aeropuerto de Guarulhos, Sao Paulo; 26 menos respecto a los 82 que había en 2019.

Lima y Buenos Aires, ciudades que reciben mayor cantidad de vuelos directos desde Santiago, en mayo 2023 registraron 93 vuelos cada una, con relación a los 113 y 106 acontecidos respectivamente en el mismo mes de 2019.

Hay rutas que a la fecha no tienen espacio de recuperación. Es el caso del aeropuerto Charles de Gaulle en París, que recibió 6 vuelos entre mayo y abril de 2019 y ninguno durante los mismos meses de este año. Hacia Guayaquil tampoco hubo movimiento, con el antecedente de siete vuelos directos en los mismos meses del periodo prepandemia.

Si bien a nivel doméstico la recuperación ha cumplido con las estimaciones, existen destinos afectados considerablemente con una menor frecuencia a la que había cuatro años atrás. Punta Arenas (29), Arica (26) y Calama (21) registraron una merma en vuelos durante mayo, lo que repercute negativamente en la condición de zonas extremas de las primeras dos regiones.

“Hay que tener muy presente que para una Línea Aérea, los mercado emisivos y receptivos, son igualmente importantes, por lo cual debemos mostrar un interesante mercado nacional que esté dispuesto a viajar al extranjero. De esta manera la inversión de elegir Chile para establecer una ruta hacia y desde un nuevo destino, se rentabilizará”, explica la representante de Achet.

Promedio de frecuencias semanales vuelos internacionales desde Chile (1).png

La conectividad aérea no recupera cifras de 2019.

ACHET.

Desventaja a nivel regional

El fin del Covid-19 como una situación de emergencia pandémica, anunciado por la Organización Mundial de la Salud, empujó el consecuente término de las restricciones sanitarias para pasajeros, como vacunas y testeos previos a los vuelos.

Chile se adaptó a los nuevos cambios el 10 de mayo de 2023, cuando de forma oficial clausuró el Plan Fronteras Protegidas, estableciendo así la primera piedra angular camino a recuperar el tráfico de turistas desde el extranjero.

A nivel regional, sin embargo, mercados fuertes como Colombia, Brasil y México llevan la delantera en cuanto a recuperación de actividad previa a la pandemia, tanto en el plano nacional como internacional. El posicionamiento dominante de estos países pone tarea a Chile, en cuanto a retomar el lugar de relevancia como una nación de estructura económica sólida y fuente primordial de turismo emisivo en el Cono Sur.

Lo reconocen de esa manera desde Achet, advirtiendo que existen dificultades y factores que complican el escenario

“Sabemos que no será fácil, hay una serie de factores que nos hacen un mercado más caro. Hay países del continente que se han recuperado muy fuertemente y han sido positivamente agresivos en su reinserción turística internacional”, argumenta Lorena Arriagada respecto a la recuperación del turismo emisivo.

Verónica Pardo, subsecretaria de Turismo, coincide en que la meta de reactivar conexiones aéreas resulta clave para empujar la recuperación de la industria, especialmente, conectando Chile con Brasil.

“Uno de los aspectos es que tenemos menos vuelos que antes. Estamos retomando vuelos, se vuelve a aumentar a dos frecuencias al día en algunos vuelos con Brasil, el principal emisor de turistas a nuestro país, y eso hace una tremenda diferencia”, explicó la autoridad.

Más rutas y mayores frecuencias

El camino hacia recuperar la conectividad internacional, en el corto plazo, tiene señales que al menos permiten evidenciar una tendencia positiva.

Como la aerolínea con más operaciones en el país, Latam Airlines anunció un aumento en las frecuencias de vuelos hacia Rapa Nui y Madrid. Además, desde el 1 de septiembre reactivarán la ruta directa Santiago – Melbourne.

Enfocados en abrir rutas a destinos dentro de Sudamérica, Sky Airline anunció en junio la apertura de una ruta entre Santiago y Porto Alegre, la que se sumó a los nuevos tramos revelados este 2023 hacia Bariloche y Miami.

Asimismo, se espera la inminente confirmación para comenzar a vender la ruta Santiago – Aruba, uno de los grandes proyectos del año de la compañía liderada por Holger Paulmann.

Desde junio JetSmart comenzó a operar bajo el sistema de código compartido con American Airlines, ampliando el catálogo de alternativas para pasajeros que deseen viajar desde Chile a múltiples ciudades de Estados Unidos con la low cost nacional. En abril pasado se sumaron a la oferta de ruta directa entre Santiago y Sao Paulo.

En línea con una mayor conectividad, para el segundo semestre de 2023 se contempla que tres aerolíneas de carácter internacional comiencen a operar en el Aeropuerto de Santiago. La llegada de Arajet, low cost de origen colombiano, abarcará un nicho para viajeros que opten por viajar a en vuelo directo a Santo Domingo, República Dominicana. Estelar, por su parte, ya marca presencia por retomar las rutas entre Santiago y Caracas que habían quedado vacantes desde el año 2016.

Reforzando las alternativas hacia América del Norte y el Caribe, Aero México retomará los vuelos entre Santiago y Ciudad de México, las cuales dejó en pausa en diciembre de 2022, también como un indicador relevante sobre la actividad del mercado aeronáutico de cara al año 2024.